Precios bajos y una cartera amplia de viviendas disponibles, principalmente de segunda mano. Son dos de los factores que el sector inmobiliario de la ciudad constata como revulsivo en el auge de ventas. Aunque tímido y alejado del volumen de operaciones cerradas en tiempos de la burbuja, el mercado de la vivienda atraviesa un período estival con movimiento, por encima del año anterior, cuando, según los datos del Ministerio de Fomento, al cierre del tercer trimestre del 2018 se contabilizaron 144 transacciones en la urbe naval. «El verano fue de bastante trabajo. Se estuvo vendiendo y alquilan …